El control de la temperatura es esencial en varios sectores industriales donde se requiere una estabilidad para asegurar la calidad de las producciones. Es por ello que en esta ocasión vamos a hablar de los tipos principales de reguladores de temperatura que existen.

¿Qué es un regulador de temperatura?

El regulador de temperatura, también conocido por controlador o termostato, es el dispositivo que se encarga de ajustar la temperatura en el valor deseado o “punto de consigna”. Mediante un sensor de temperatura en su interior, mantiene una temperatura específica y estable en un sistema o un ambiente.

Los reguladores tienen 3 componentes principales que permiten mantener la temperatura en todo momento:

  • Sensor de temperatura. Mide la temperatura real del entorno de forma constante.

  • Unidad de control. O también llamado controlador, recibe la información del sensor, comparándola con el punto de consigna.

  • Elemento de control. También llamado actuador, son los componentes que se activan si el controlador detecta una diferencia en el ambiente con el punto de consigna.

Este proceso de repite constantemente para asegurar que la temperatura deseada en todo momento. Para un óptimo control, contamos con reguladores analógicos o digitales dependiendo de las necesidades de cada aplicación.

Reguladores de temperatura analógicos

Los reguladores analógicos se consideran los más básicos y tradiciones, donde se prioriza la sencillez y robustez. Se utilizan componentes electrónicos discretos como resistencias o capacitadores para medir la temperatura, la cual se puede ajustar mediante un dial. Las lecturas de temperatura se indican con una aguja o escala graduada.

Se utiliza en hornos industriales y control de procesos básicos en maquinaria.

  • Fácil configuración y uso.
  • Alta durabilidad en entornos industriales exigentes.
  • Costes optimizados para procesos estandarizados.

Reguladores de temperatura digitales

Por otro lado, tenemos los reguladores digitales más modernos y versátiles que los analógicos. Procesan la información en forma de señales discretas o binarias, lo que les permite una mayor complejidad y precisión en sus registros de temperatura.

Transforman las señales analógicas de los sensores en datos digitales, los cuales el usuario puede interactuar con ellos a través de una pantalla digital y botones. El uso más común para estos reguladores es en cámaras climáticas, procesos químicos y farmacéuticos, y sistemas de automatización avanzada.

  • Interfaces intuitivas y programables.
  • Amplia compatibilidad con sensores de temperatura (termopares, RTD, etc.)
  • Alarmas, ajustes y opciones de comunicación remota.

La elección entre uno y otro depende de la aplicación específica, la precisión requerida, el presupuesto y las funcionalidades deseadas. Sea cual sea la necesitad que tengas en tu sector, nuestro equipo de expertos está listo para asesorarte. Contamos con un amplio catálogo de reguladores de temperatura que aseguran calidad, precisión y eficiencia en todos los sectores industriales.